La ventaja del alquiler de restaurantes sin traspaso
El alquiler de negocios de restauración es un modelo cada vez más consolidado y popular en nuestro país. Pero en los últimos años, ha surgido una corriente a favor del alquiler restaurante sin traspaso, es decir, sin la necesidad de pagar una cantidad inicial elevada por “heredar” el negocio existente.
¿Qué es el traspaso?
El traspaso es un acuerdo privado entre el dueño de un negocio (traspasante) y una tercera parte (traspasario). El traspasante vende los derechos para continuar con la operación del negocio a cambio de un precio acordado.
Los motivos para apostar por el alquiler sin traspaso
A continuación, se presentan algunos de los motivos más importantes para optar por el alquiler de un restaurante sin traspaso:
- Menor inversión inicial: Al no tener que realizar el pago del traspaso, la inversión inicial se reduce sustancialmente, lo que facilita que emprendedores con menos recursos puedan iniciar su actividad.
- Libertad para crear: Al no traspasarse un negocio ya existente, el nuevo empresario tiene total libertad para crear su propio concepto de restaurante.
- Riesgo compartido: En este modelo, es más común que el propietario del local asuma parte del riesgo, ya que una vacante prolongada no le interesaría.
Aspectos a considerar
El proceso de alquilar un restaurante sin traspaso no siempre es sencillo, por lo tanto, aquí te mencionamos los aspectos importante a considerar antes de firmar cualquier contrato.
Derechos y obligaciones contractuales
- Es vital que cada parte entienda y acepte sus derechos y obligaciones dentro del contrato.
Condiciones del local
- Investiga el estado actual del local para evitar sorpresas con reformas o reparaciones inesperadas.
Negocia las condiciones
- No dudes en negociar todas las condiciones con el propietario: precio del alquiler, duración del contrato, entre otras cosas.
Tu oportunidad de negocio
En definitiva, el alquiler de un restaurante sin traspaso puede ser una excelente oportunidad de negocio para aquellos emprendedores que buscan iniciar su propio proyecto de restauración con un menor desembolso inicial.