Galicia – Rias Altas
En la actualidad, dos lenguas son oficiales y de uso generalizado en Galicia: el gallego autóctono, una lengua románica estrechamente relacionada con el portugués, con el que comparte la literatura medieval gallego-portuguesa; y el español, habitualmente llamado castellano. Aunque la mayoría de los gallegos son bilingües, una encuesta de 2013 informó que el 51% de la población gallega hablaba gallego con mayor frecuencia en su día a día, mientras que el 48% utilizaba el castellano con mayor frecuencia[13].
El nombre evolucionó durante la Edad Media de Gallaecia, a veces escrito Galletia, a Gallicia. En el siglo XIII, con la aparición escrita de la lengua gallega, Galiza se convirtió en la forma escrita más habitual del nombre del país, siendo sustituida durante los siglos XV y XVI por la forma actual, Galicia, que es también la grafía del nombre en español. La denominación histórica de Galiza volvió a popularizarse a finales del siglo XIX y las tres primeras cuartas partes del XX, y aún hoy se utiliza con cierta frecuencia. La Xunta de Galicia, el gobierno local descentralizado, utiliza Galicia. La Real Academia Gallega, institución encargada de regular la lengua gallega, aunque reconoce Galiza como una denominación legítima actual, ha declarado que el único nombre oficial del país es Galicia[19].
Cadetes CB Ría de Ribadeo contra Cidade de Lugo (14/11
Aparcamiento del faro de Roncadoira. Llegar por la noche después de las 20:00. Carretera sin salida. Gran vista del océano pero a veces con viento. Si no hay espacio, vuelva a la carretera durante 800 m y tome un camino a la derecha. La misma vista pero con menos viento.
Aparcamiento del faro de Roncadoira. Llegue por la noche después de las 20:00 horas. Camino sin salida. Grandes vistas al mar pero a veces con viento. Si no hay espacio, retroceda 800 m por la carretera y tome un camino a la derecha. La misma vista pero con menos viento.
Aparcamiento del faro de Roncadoira. Llegada por la tarde después de las 8 p.m. Camino sin salida. Gran vista del océano pero a veces ventoso. Si no hay espacio, volver a la carretera durante 800 my tomar un camino a la derecha. Misma vista pero con menos viento.
KAYAK DE LUGO
En esta etapa el mar es el protagonista. Un sinfín de hermosas playas bordean el camino, como las de Arealonga, Esteiro, Bimbiero y Concha. Impresionantes acantilados las separan, y todo se puede disfrutar desde el mirador de Coitelo (“el mejor banco del mundo”). Se trata de un entorno inmejorable, habitado por gentes muy vinculadas al mar, en localidades como O Vicedo, O Barqueiro y Porto de Espasante, que tienen sabor a mar.
Avanzando por una pista asfaltada paralela a la del tren, se llega al kilómetro 6 de esta etapa. Tras continuar unos metros, se deja atrás el asfalto y se cruza la vía del tren por un paso elevado y se inicia un corto tramo de subida esta vez por una pista de tierra. Al llegar a la carretera con acera y farolas, el viajero gira a la izquierda y continúa en descenso hasta la playa de Esteiro donde, a medio camino y a mano derecha, se encuentra la ermita de Santa Rosa.
El viajero se adentra en este espectacular paisaje formado por la playa y la ría de Esteiro, que están incluidas en la Red Natura 2000 como Zona Especial de Conservación (ZEC) bajo el nombre de “Estaca de Bares”. Una larga zona entablada permite disfrutar plenamente de este entorno rebosante de biodiversidad. Al salir de esta pasarela, el viajero gira a la derecha para adentrarse en una pista forestal llena de eucaliptos que va aumentando de altura. La pista se convierte en una ruta, y mientras el viajero sigue subiendo, su esfuerzo se ve recompensado con unas vistas impresionantes de los acantilados.
Cine rodado en A Mariña
Hay unos 6 km desde el centro hasta el monasterio, más la fotografía, aproximadamente unas relajadas 2,5-3,5 horas de ida (x2 si piensas volver andando). El taxi puede recogerte en la carretera cercana al monasterio.
La Playa de las Catedrales está formada por acantilados y comprende un tramo de costa a medio camino entre las rías de Ribadeo y Foz. La acción del agua, el viento y el clima han configurado una impresionante serie de cuevas y arcos de roca de hasta 30 metros de altura, además de formaciones geológicas que, vistas en conjunto, se asemejan a los elementos arquitectónicos de una catedral.
Durante la marea baja se hace más evidente el tamaño de sus acantilados y cuevas marinas, que van desde pequeñas grietas en la roca hasta grandes cuevas cuyos techos se han derrumbado debido a la erosión de las olas. Las mareas especialmente bajas permiten acceder a las playas cercanas a través de la extensión de la arena. Como el tramo de costa es casi horizontal, el agua vuelve a cubrir la playa muy rápidamente.
Es mi segunda visita y esta vez desgraciadamente he econtrado los pasos de algún lunático que no debería haber caminado. Recogí la ruta 3 en el lineal de envoltorios de caramelos de Eucaliptus y vi un árbol con las iniciales de quizás el mismo impresentable. Es triste que alguien sea capaz de causar daños en un espacio como este.
